3 formas de aumentar la resiliencia de las instalaciones comerciales

Las instalaciones comerciales, como centros de datos, hospitales, aeropuertos, plantas de tratamiento de aguas residuales o universidades, son las más afectadas económicamente por las interrupciones del servicio. El laboratorio nacional Lawrence Berkeley estima que las empresas comerciales sufren el 70 % de las pérdidas económicas de $44 000 millones que causan las interrupciones de servicio cada año.

De estas instalaciones, los centros de datos son generalmente los que pierden más dinero por este motivo. El año pasado, el 25 % de las interrupciones que sufrieron tuvieron un costo superior a $1 millón, según Uptime Institute. Esto supone un aumento del 10 % con respecto a 2021.

Para las instalaciones comerciales, la resiliencia del suministro eléctrico es tan importante como los bienes y servicios que ofrecen a la sociedad. Sin resiliencia, estas instalaciones corren el riesgo de tener periodos de inactividad, de interrumpir el flujo comercial y de sufrir enormes pérdidas económicas.

Mientras las empresas de electricidad modernizan la red para reducir las interrupciones del servicio, las instalaciones comerciales pueden seguir su ejemplo e implementar estas estrategias similares para mejorar la resiliencia:

1. Diseñar un sistema distribuido

La resiliencia comienza con el diseño de un sistema eléctrico distribuido. Al ser el punto de interconexión con los generadores de energía, un sistema de media tensión bien diseñado es la base para la continuidad de la electricidad y dicta cuan resiliente puede ser una instalación.

Un enfoque distribuido crea redundancia en un sistema mediante la conexión de fuentes de generación de reserva en caso de que haya una falla. Dado que los sistemas distribuidos incorporan equipos de protección en todo momento, estos dispositivos pueden limitar una falla a un área pequeña. Toda la instalación continúa operando mientras se restablece la electricidad desde otra fuente.

Las empresas de electricidad utilizan estos diseños de sistemas de eficacia probada para mejorar la red, y cada vez son más las instalaciones comerciales que reconocen las ventajas de incorporarlos. En los últimos años, el 40 % de los centros de datos mejoraron su sistema al crear redundancia, según muestran los datos del Uptime Institute. Estos diseños proporcionan a las instalaciones un plan de respaldo cuando ocurren fallas, de modo que puedan seguir operando.

Por otro lado, un diseño distribuido es mucho más resiliente que uno centralizado, en el que una amplia alineación de interruptores alimenta a toda una instalación. Un sistema centralizado no puede interrumpir las fallas de forma localizada. Cuando se produce una falla, todo el sistema es vulnerable al rendimiento de una pieza central del equipo.

2. Usar interruptores robustos y compactos

Además de seguir los diseños de sistemas utilizados por las empresas de electricidad, las instalaciones comerciales pueden incorporar un interruptor robusto y apto para empresas de electricidad que aporten una protección avanzada a sus operaciones.

Los interruptores de diseño robusto ayudan a las instalaciones a resistir los retos medioambientales, incluidos los causados por las inclemencias del tiempo y otros factores, como la acumulación de condensación. A medida que el cambio climático provoca condiciones meteorológicas más extremas que pueden amenazar las operaciones, el uso de este equipo evita interrupciones del servicio y mantiene a las instalaciones en funcionamiento.

Gracias a la naturaleza compacta de este equipo y los diversos estilos de instalación disponibles (sobre el suelo o en una bóveda subterránea), las instalaciones tienen flexibilidad para instalar el equipo donde sea necesario. Esto les permite destinar sus espacios valiosos para otros fines.

3. Restauración automática

La automatización permite alcanzar mayores niveles de resiliencia del sistema. Gracias al uso de controles que supervisan los datos del sistema en tiempo real, la automatización hace que la gestión de la Interrupción del servicio sea lo más inteligente y rápida posible. Las soluciones automatizadas permiten restablecer en cuestión de minutos, o incluso segundos, sistemas eléctricos complejos.

Al reducir la inactividad con respuestas rápidas a las fallas, las instalaciones comerciales ahorran dinero y vuelven a funcionar de inmediato. De este modo, se evitan las pérdidas de ingresos derivadas de la inactividad y costosas consecuencias provocadas por una interrupción del servicio, como los daños en el inventario o la exposición de datos. La automatización también permite al personal de las instalaciones centrarse en otras tareas en lugar de tener que restablecer la electricidad de forma manual.

Las fallas causadas por errores humanos, una dificultad recurrente para las instalaciones comerciales, también pueden eliminarse con la automatización. En los centros de datos, el 25 % de las interrupciones del servicio se deben a errores humanos, según el Instituto Ponemon. Las instalaciones que aprovechan la automatización reducen las posibilidades de error porque su personal no necesita operar el equipo de forma manual.

La resiliencia conduce a operaciones continuas

A medida que las instalaciones comerciales se centran en el crecimiento de los mercados y en hacer frente a las inclemencias meteorológicas, la resiliencia se convertirá en una necesidad empresarial cada vez más importante. Sin el sistema eléctrico y los equipos adecuados, las instalaciones comerciales tienen limitada su capacidad para seguir funcionando. Un diseño de sistema distribuido con interruptores robustos y automatización, da a estas instalaciones la resiliencia que necesitan para un funcionamiento continuo y para evitar las pérdidas ocasionadas por las interrupciones del servicio.